Monasterio de Sijena (fotografía de la web Patrimonio de Huesca)
El pasado 25 de Febrero, la consejera del
Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Mayte
Pérez, y el consejero de Cultura de la
Generalitat de Cataluña, acordaron la devolución de 53 obras de arte. Estas
obras, procedentes del Monasterio de Sijena se conservan en los almacenes del
Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC) desde que las monjas del Monasterio
las vendieran a la Generalitat en los años setenta. Estas obras no están
catalogadas y regresarán en calidad de depósito, por lo que seguirán siendo
propiedad de la Generalitat de Cataluña. ¿?
Según el consejero de Cultura de la
Generalitat, las otras 44 piezas reclamadas, que se conservan en el Museo de
Lleida, su devolución depende del informe favorable de otras instituciones
catalanas. El objetivo de la Generalitat, según ha comentado el consejero
catalán, es «articular mecanismos institucionales que hagan posible una gestión
conjunta desde el punto de vista patrimonial». Estas obras están inventariadas
como patrimonio cultural catalán y también aragonés.
Este acuerdo se ha producido pocas
semanas después de que la Generalitat recurriera ante el Tribunal
Constitucional la sentencia de un juzgado de Huesca que establecía la
devolución de las 97 obras. Las obras objeto del acuerdo son las de menor valor de todas las que le reclama Aragón. !¡
Recordemos que las pinturas murales del Monasterio,
que se exponen en el MNAC, también han
sido reclamadas por Villanueva de Sijena. El pleito está pendiente de sentencia
en el Juzgado de Primera Instancia nº 2 de Huesca. Para saber más sobre este
tema podemos leer el artículo del Periódico de Aragón de fecha 9 de noviembrede 2015.
Queda pendiente la solución de las 113
obras de arte del Aragón oriental que se conservan en el Museo de Lleida y de
las pinturas murales de la sala capitular del Monasterio de Sijena, expuestas
en el MNAC. Litigio que hace años fue resuelto, en la jurisdicción
eclesiástica, con sentencia firme que ordenaba a la Diócesis de Lérida a
devolver todas esas piezas a sus legítimos propietarios. Sin embargo, la
sentencia nunca ha llegado a ejecutarse. Esta colección permanece en el Museo
de Lérida. La Diócesis ilerdense alega que no puede entregarlas sin el permiso
de la Generalitat, y ésta se ha negado sistemáticamente a darlo.
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